El viernes es mi cumpleaños número 36, les soy sincera, treinta y seis años me parecen bastantes, aunque tampoco tantísimos, pero si creo que son un número razonable y aunque no me siento vieja, sí siento que he vivido bastante. Creo que soy joven y que tengo toda la vida por delante, espero, y aunque bien es cierto que jamás dejamos de aprender, es una cantidad sustancial de años a los que he debido sacarles suficiente provecho, porque si no es ahora, ¿cuándo?. Siempre he dicho, en lo personal, que el éxito de la edad es haberle sacado el jugo a cada etapa y pasar a la siguiente sin pendientes, por supuesto siempre aprendiendo, pero creo que las cosas se hacen más fáciles si las etapas de la vida se aprovechan al máximo y no se saltan... y por supuesto todo se puede hacer cuando nos lo proponemos, y lleva un mérito extraordinario por ejemplo, personas que han terminado la universidad a los 80 años, han aprendido a leer y escribir a los 60, han perdido la virginidad a los 40... por supuesto que nunca es tarde, pero creo (en lo personal) que es más pleno quien, en general, en la vida, vive acorde a cada etapa... ser niño en la niñez, ser adolescente en la adolescencia y ser adulto en la adultez, y sé que suena redundante y hasta puede parecer tonto, pero en el mundo hay niños trabajando como adultos, adolescentes con hijos y adultos sin responsabilidades que creen que aún son niños o adolescentes...
En fin, en algunos post anteriores he mencionado haber completado mi "bucket list", pero nunca he hablado de ella específicamente, y me han escrito preguntándome de eso. El término "bucket list" en inglés significa la serie de experiencias o logros que una persona espera tener o lograr durante su vida. Cada quien tiene sueños, deseos, prioridades... mi lista de "sueños y logros" la fui escribiendo mentalmente durante mi niñez y adolescencia, no se si cada uno ha sido grande o pequeño, lo que sé es que para mí cada uno ha sido importante y me siento agradecida con la vida por haber completado esa lista y tener la oportunidad de empezar una nueva secundaria, que aunque mis nuevos deseos son importantes, son significativamente menos importantes que los primeros, porque ellos (los primeros) son la base de estos nuevos sueños, sin haber completado la primera fase, la segunda sería imposible.
1. Estudiar, graduarme del colegio y de la universidad.
Existiendo más de 58 millones de niños sin escolarizar en el mundo, la educación es para mí, una de las joyas más preciadas de la vida. Desde siempre mi sueño de estudiar fue enorme, graduarme de la universidad desde pequeña fue mi gran sueño, y es posible que gran parte de la sociedad guatemalteca de por sentado los estudios universitarios, pero para la gran mayoría de las personas "afuera de la burbuja" es todo un reto.
2. Estudiar y trabajar en el extranjero.
De una u otra manera cumplí los dos, aunque siempre quise estudiar fuera y a pesar de haber tenido la oportunidad pero por ser menor de edad y por oposición de mi papá no lo logré, las oportunidades que tuve en mis manos de asistir a congresos fuera de Guatemala siempre las aproveché, tuve la oportunidad de ir a congresos internacionales en México, Estados Unidos e Italia. Siempre existe más de alguna manera de hacer los sueños realidad. Más adelante tuve la oportunidad de trabajar, aunque por un período corto en Estados Unidos y Francia, pero la experiencia la tuve y experimentarlo fue extraordinario y enriquecedor tanto para mi vida profesional como personal... cuando las cosas se viven al máximo el tiempo es un factor secundario.
3. Hacer un gran viaje a Europa.
Mi primer gran viaje a Europa lo hice en el 2,001... un gran roadtrip por España hasta el sur de Francia y luego por aire a Italia, fue un graaaaan viaje en todo sentido. La vida fue buena conmigo y después de ese viaje he podido regresar muchas veces y de ganancia un par de viajes a Japón. ¡Viajar es vivir!
4. Viajar sola.
En el 2,006 agarré mis cosas y me fui a España, allá me reuniría con amigos, durante unos días mis amigos estaban fuera y no podía quedarme con ellos, cerrando los ojos y frente a un mapa escogí un destino al azar, Bilbao fue ese destino y fui sola por casi una semana. Una película podría hacer de ese viaje, fue un viaje a una dimensión desconocida para mí, yo por mi cuenta a los 25 años, sin conocer a nadie paré con un grupo de personas que nos hicimos amigos y por poco una propuesta de matrimonio hace que me quedara allá. Fue un viaje loco... loquísimo.
5. Tener mi propio lugar para vivir.
A los 26 años, hace diez, me fui por primera vez a vivir con un novio, al año siguiente me fui a vivir con otro novio... la segunda fue "menos peor" que la primera, aunque con el segundo si sentí que tenía mi casa... ese sentimiento tener un espacio propio (aunque mío en sí pues no era porque lo rentábamos) era mi casa, me sentí verdaderamente adulta por primera vez, toda mi vida había soñado con un espacio propio. Lograrlo no tiene palabras para poderlo describir.
6. Vivir sola.
A ese segundo novio lo mandé al diablo y me quedé en la consideraba y considero mí casa, que ahora es nuestra con Jorge. Viví allí sola durante casi un año. Al principio busqué "roomate" pero por una razón u otra el plan no cuajó y viví sola... fue la época de más oscuridad y luego de luz en mi vida, me volví loca y luego recobré la cordura, aprendí muchísimo, me conocí aún más, aprendí a vivir conmigo misma, cosa que muchas veces pasamos desapercibida, me peleé y luego hice las paces conmigo misma... esa ha sido una de las etapas de más aprendizaje. Fue un ejercicio súper enriquecedor.
7. Conocer a Warhol (su obra) en persona.
Andy Warhol desde mi adolescencia fue un personaje con quien gráfica y estéticamente sieeeeeempre me identifiqué, el fue una de las razones por las cuales estudié diseño, desde la primera vez que vi un cuadro suyo me enamoré... la primera vez que vi su obra en persona lloré de la emoción, no me podía controlar, me sentí como niña en Disney por primera vez cumpliendo un sueño de toda una vida... desde entonces he tenido la oportunidad de verlo muchas veces y sigue siendo especial.
8. Encontrar el verdadero amor (más allá del propio).
Desde pequeña casarme en sí nunca fue una prioridad, soñaba más con vivir sola y tener un hijo que en sí casarme. Me enamoré un par de veces y me rompieron el corazón un par de otras y el deseo de encontrar ese amor era algo que titilaba, a veces me interesaba y otras no, pero como soy una romántica ridícula empedernida el deseo por encontrarlo nunca se murió del todo y de una manera u otra siempre estuvo allí, nunca se murió. Y lo encontré el 2,013 finalmente. Vivo agradecida con la vida cada día por ello. Y hasta nos casamos... no fue nada tradicional, lo cual nos hizo felices, fue una celebración de amor más que una boda, fue perfecta.
9. Plantar un árbol y escribir un libro.
Un gran cliché pero recuerden que soy romántica ridícula empedernida. Árboles he plantado algunos y el libro mutó a este blog, las cosas no son siempre como las soñamos... a veces son mejores y gracias a este blog he conocido a seres maravillosos que tal vez con un libro no habría conocido... aunque la idea del libro en sí tal vez, algún día suceda...
10. Tener un@ hij@
Aunque no ha nacido, soy y seré su mamá siempre y lo que he vivido con nuestra hija desde ya es algo que siempre será importante en mi vida. Lo vivido, lo bailado y lo gozado nadie me lo quita.
Lo mejor de cumplir este sueño de último, y no es que sea menos importante sino todo lo contrario, es que creo que es "menos difícil" ser padre cuando el resto de tus sueños han sido ya una realidad, cuando te sientes realizado en lugar de frustrado por no haber alcanzado tus metas. Creo que esa es la mayor ventaja de esperar un poco para tener un hijo.