Como muchos saben, acabamos de viajar la bebé y yo a Italia un par de días, fue mi segunda vez en Milán y la primera vez que la bebé viajaba en avión. El trayecto era lo que me daba un poco más de nervios, seguí mi sentido común (indispensable) y algunos consejos que ahora les comparto para hacer el viaje más cómodo y fácil.
El primer trayecto de dos horas y media no me preocupaba tanto como el de nueve horas y media, un viaje corto es mucho más fácil y honestamente las complicaciones son mínimas, pero a mayor cantidad de horas, mayores las probabilidades que algo salga mal.
1. Utilizar la fila de viajeros con niños: en Guatemala existe una aduana e inspección de equipaje especial para familias o personas con niños, en la mayoría de aeropuertos de Europa también existe lo que le llaman “family lane” que es una fila especial de inspección de equipaje para viajeros con niños y en Estados Unidos algunas veces dan prioridad también pero no es parte de un protocolo estándar como en los otros casos. Por lo que en donde exista es importante y valioso utilizarlas para ahorrar largas filas, tiempo e incomodidades.
2. Aduana: en el caso de Guatemala, por lo general, cuando el menor es acompañado únicamente por uno de los dos padres, es necesario presentar el certificado de nacimiento y una carta poder donde el padre que no acompaña al menor autoriza al otro a sacar del país al niño o niña.
3. Equipaje compacto: es increíble como un ser tan pequeño necesita tantas cosas, y como somos los papás quienes debemos llevarlas, es necesario utilizar la menor cantidad de equipaje posible y que ese equipaje se pueda apilar para hacerlo compacto, es decir que el carruaje se pueda adherir o incorporar a una maleta para poder llevar dos cosas con una misma mano, si se lleva un maletín de igual manera que se pueda unir a otra maleta para hacer un solo bulto. Utilizar backpacks en lugar de maletines tradicionales o bolsas, mientras menos manos se utilicen, todo funciona mejor.
Una familia que viajaba de regreso con nosotros y que venía de Madrid, llevaban esta belleza de maleta-carretilla (carry on) ideal para niños a partir de los 18 meses. Me parecieron súper útiles y funcionales para viajar con niños de hasta 4 años aproximadamente.
4. Carruaje de viaje / travel stroller: comprobado de primera mano, el carruaje GB Pockit+ de Bebé Juguetón es el mejor carruaje ultra compacto y ultraligero que existe en el mundo. Ganador del Record Guinness como el carruaje doblado más compacto del mundo. Pesa solamente 15 libras, funciona para niños desde 6 meses hasta niños de 45 libras (4 años aprox.) y es el único permitido para llevarlo en el compartimento de equipaje de mano en la cabina del avión.
Es súper fácil y práctico de doblar y extender, nosotros lo colocamos unido a la maleta carry on con una net y fue perfecto. Así podía ingresar a la bebé al avión en cargador canguro y con una mano llevar la carry on y el carruaje pasando por lo pasillos estrechos del avión sin complicación.
5. Toma de líquido al despegue: si el niño toma pecho perfecto, si toma biberón también, lo necesario es que el bebé al tomar el líquido, logre no tener problemas en los oídos por la presión al momento del despegue. Si el vuelo empieza bien, tenemos la mitad de la batalla ganada. Ésto es equivalente a lo que hacen muchos adultos al despegar el avión, mastican chicle para evitar que se les tapen los oídos.
6. Ropa cómoda: esta es recomendación para todos, pero para los niños es vital que estén cómodos, por lo que se debe evitar el uso de jeans por ejemplo y en su lugar utilizar pants o pantalones de cintura de elástico es lo más aconsejable.
7. Comida: los snacks son una manera fabulosa de mantener a los niños felices y entretenidos. Los puffs de Happy Baby de Bebé Juguetón son los más deliciosos y nutritivos, a la bebé le encantan y no solo la alimentan sino que el tomarlos con su manita la entretiene y refuerza su motricidad fina.
Respecto a los tiempos de comida, ella que come de todo muy bien comió una cena normal del avión y para los vuelos cortos donde no sirven comida, de ida llevaba su desayuno y luego de regreso, compré en el aeropuerto una merienda pequeña por si le daba hambre.
8. Pañalera bien preparada: llevar todo lo necesario incluido el botiquín especial del bebé por cualquier emergencia. Para un viaje de un total de 12 horas en el aire y 5 de escala en aeropuerto, llevé los biberones necesarios para un día y en cada avión al entrar pedía al sobrecargo que me llenara cada uno con agua para tener todo listo desde el principio. Los pañales necesarios también para un día y tres extras (dos normales y uno de noche) ¡Los utilicé todos!, en el viaje de Miami-Milán hizo más veces de las que generalmente hace y por segunda vez en la vida tuvimos un accidente marca DANGER!!! hizo al punto de mancharse hasta la espalda por lo que, otra lección, llevar a la mano una mudada extra durante el vuelo o hasta dos para ser precavidos.
Recomendación, antes de abordar hacer cambio de pañal para evitar cambiarlo en el avión, lo cual es bastante incómodo.
La pañalera es recomendable llevarla abajo del asiento y no en el compartimento de maletas ya que en cualquier emergencia es mucho más fácil tener a la mano todo lo necesario.
9. Entretenimiento: importantísimo pero también llevar lo necesario para no ocupar en el equipaje lugar de más. Llevábamos muñequitos de animales para la bañera que son como pelotitas, eran varios con diferentes figuras, colores y texturas. Su peluche favorito que se llama Toto y calcomanías que no llegamos a utilizar porque gracias a Dios se entretuvo con los muñequitos y su peluche. Coloqué una frazada del avión debajo de ella en el asiento y metidos los otros dos extremos en la bolsa frontal para hacer una especie de lona donde caían los muñequitos cuando los tiraba para no tener que arrastrarme después buscando los muñecos.
Además en las conexiones aprovechar a que jueguen y corran para que suban cansados al avión y logren así dormir.
10. Entrenamiento: Esto es si viajan solos especialmente a Europa donde los accesos son a veces difíciles por la falta de elevadores por ejemplo, es necesario tener una rutina de ejercicio si no es verdaderamente desgastante y no es posible llevar un buen ritmo. Viajar solo con un niño pequeño es una prueba de resistencia por lo que es bueno estar preparados físicamente.
Honestamente el viaje en sí fue bastante fácil a excepción de la llegada y salida en trenes y avión y todos los trámites que eso conlleva. Haber viajado con la bebé fue espectacular, cada dificultad, que afortunadamente fueron pocas, valieron la pena porque la súper aventura que vivimos juntas es algo que llevaremos en nuestro corazón por siempre. Yo amo viajar y desde ya deseo que ella también lo disfrute y sea una mujer independiente, decidida, valiente y capaz de darle la vuelta al mundo si es lo que desea.
¡Buen viaje!