PANTONEMAGENTA

Dejar el pañal: nuestro proyecto de cuarentena

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En octubre del año pasado compramos la ruedita del inodoro pensando que en algún momento de la vida iniciaríamos el proceso de dejar el pañal con nuestra hija, que para ese entonces tenía dos años y cuatro meses, he de confesar que si a un trámite le huía, era a ese... evitaba pensar que el momento de empezar a “entrenar” a Carmela a ir al baño llegaría pronto… compramos la ruedita adaptadora (en Bebé Juguetón), se la presentamos en casa sentándola una vez, le pareció interesante, le dijimos que en el futuro cercano iría al baño como mamá y papá porque nosotros “ya no usamos pañal” y no volvimos a tocar mucho el tema.

Eso sí, la acostumbramos a que nos acompañara cuando íbamos al baño, ya fuera yo, o su abuela; le enseñábamos cómo íbamos con el uno y con el dos, cómo nos limpiamos, etc… y puede sonar desagradable, pero para alguien que nunca ha ido al baño, es viendo que aprende y finalmente ir al baño es algo humanamente normal y necesario… todos los humanos del mundo y de la historia desde Adán y Eva hacemos pipí y popó… todos! hahahaha!!!

Desde que cumplió dos años, empezamos a utilizar pañales entrenadores de tres años, pero no precisamente porque estábamos entrenando sino porque por altura y peso, los otros pañales ya no nos funcionaban mucho.

En enero que entró por primera vez al colegio, desde los primeros días nos contó que el baño era “lindísimo porque es chiquito para mi culete que es chiquito”, en el colegio, donde el método es totalmente Montessori el inodoro y el lavamanos son pequeños para facilitarle la ida a los niños pequeñitos. La maestra de Carmela nos habló y nos explicó que aunque no había problema en que usara pañal y que en el colegio la cambiaban, era importante que practicáramos en casa porque en el colegio estaba, la mayoría del tiempo, interesada en ir al baño pero que algunas veces avisaba y otras (la mayoria por falta de costumbre) no lo hacía.

Empezamos a ponernos más diligentes en el asunto y cuando estábamos en casa le preguntábamos si quería ir al baño, algunas veces iba y otras no, honestamente no éramos muy constantes porque también la mayor parte del tiempo no estábamos en casa. Hubo accidentes en el colegio, un par de veces se le salió el pipí y eso nos hizo practicar más aunque no lográbamos ser constantes, muchas personas nos dijeron que “el mejor método” (no existe tal cosa no se preocupen) era quitarle el pañal, quedarse en casa un fin de semana y en esos dos días aprendería.

Sobre mi cadáver le iba a quitar el pañal de un sólo y “experimentar”; me costó mucho tener la alfombra que tengo y preferiría que usara pañal hasta los 15 años antes que ver sucia mi alfombra bella… ni tampoco pasaría limpiando charcos de pipí cada hora que orina… no creo que haya que ser extremo para lograr un objetivo tan natural como ir al baño… y eso justamente pensaba… ir al baño es algo natural, eventualmente aprendería sin mayor desastre fecal y sin poner en peligro mi alfombra ni mi paz mental… seguramente para cuando fuera a la universidad o escuela de estudios superiores… ya habría dejado el pañal hahahahaha!!! ese pensamiento me daba paz y me dejó de preocupar.

El 14 de marzo iniciamos la cuarentena y desde el lunes decidimos que si algún provecho (además de ponernos a salvo, por supuesto) le sacaríamos a esta etapa de estar en casa, sería aprender a ir al baño. La primera semana puse una alarma cada media hora, sonaba y tuviera ganas o no, íbamos al baño, a veces le ilusionaba y le parecía un juego entretenido y otras se ponía necia con un “no tengo ganas” y no había poder humano que la hiciera cambiar de opinión y después de tratar de convencerla, a veces lo lográbamos y otras no, y por supuesto que cuando no lo lográbamos mojaba el pañal entrenador y ella misma se daba cuenta que habría sido necesario ir. La semana siguiente a esas dos, seguíamos con la alarma y tal cual el experimento de Pavlov, sonaba la alarma y ella misma nos decía “vamos al baño”, si en algún momento no le salía nada no había problema y le decíamos “no importa, lo que importa es que lo intentamos”, en esa misma semana la alarma ya no fue cada media hora sino cada hora, y si entre alarma y alarma le daban ganas, ella misma avisaba que quería ir al baño, otras veces menos exitosas, hubo “accidentes” y ella misma pedía que la cambiáramos, llegó el momento donde le incomodaba estar mojada y consideramos ese momento ¡una gran victoria! Cada vez los accidentes fueron menos y la alarma no sonó más.

El trámite de la “entrenada relajada” nos duró mas o menos un mes: dos semanas de la alarma cada media hora, una semana de alarma cada hora y una semana de algunos accidentes ocasionales. Hace poquito más de un mes no ha habido ni un sólo accidente, usa un mismo pañal entrenador todo el día (como si fuera efectivamente ropa interior) que si mucho se le salen un par de gotas en algún momento y nada más. Avisa religiosamente cada vez que desea ir al baño por el uno o por el dos, cuando de plano ya no aguanta hasta hace un bailecito chistosísimo tratando de aguantar las ganas y lo logra exitosamente!

La hemos acostumbrado a ir al baño cada noche antes de dormir (sienta o no, ganas de ir) y al día siguiente ya no amanece con el pañal tan cargado, algunas noches hasta se ha despertado pidiendo que la llevemos al baño, por lo que con el control nocturno de esfínteres también hemos progresado bastante aunque no me quita el sueño.

El pañalito entrenador, aunque al parecer ya no lo necesita, se lo quitaremos definitivamente cuando ella diga que no quiere usarlo más y mientras tanto yo me siento tranquila, porque si en algúuun momento sucede un accidente, el pañal aguanta. La prueba de fuego será cuando volvamos a la rutina de salir y nos mantengamos invictos!

No existe “el mejor método”, no existen recetas ni reglas, éste es un proceso como muchos, donde lo primero es que el niño o niña desee hacerlo, y cada uno tiene su ritmo y su tiempo… y no requiere de sufrimiento ni de la criatura, ni de los papás… ni de la alfombra favorita de la sacrosanta madre que le dio la vida a la criatura ;)